NUESTRA HISTORIA

Nos remontamos a 1996 para comenzar nuestra historia, la historia de la Yeguada del Hierro de la Magdalena.

Los hermanos Casado Castañeda iniciamos este camino criando exclusivamente caballos de Pura Raza Española de estirpe Cartujana, ese caballo barroco, elegante y de extraordinaria nobleza, con el objetivo de mantener la pureza más estricta de la raza. Comenzamos con ocho yeguas de procedencia Urquijo con hierro de Salvador Cortés y dos sementales: Amoroso XVI, del prestigioso Hierro del Bocado, y Atlántico XII, de D. Juan Gómez Cuétara. Aún recordamos en la familia, con mucha alegría y algo de nostalgia, el primer potro nacido en casa, Adelio.

Hierro de la Magdalena y Hierro de Carmen Casado

Con el paso de los años y debido a nuestra gran afición por la Doma Clásica, abrimos nuestros horizontes hacia el Caballo Pura Raza Español de Deporte. En esta segunda etapa quisimos mantener nuestra esencia con la cría del caballo Cartujano bajo el Hierro de la Magdalena, y fue entonces cuando creamos nuestro segundo hierro, Yeguada Carmen Casado, buscando una descendencia centrada en dos pilares fundamentales: la calidad en los aires y buenas aptitudes para el deporte.

Casi tres décadas después, nos mantenemos firmes en nuestros objetivos y seguimos con la cría de ambas líneas, Caballos P.R.E. Cartujanos y Caballos P.R.E. de Deporte bajo un único hierro, EL Hierro de la Magdalena. Tras una cuidadosa selección de los mejores reproductores del panorama nacional, hoy podemos decir que estamos orgullosos de cada uno de nuestros ejemplares. Podemos mencionar varios caballos calificados como caballos de élite (de los 6 que existen en el mundo) en nuestros orígenes, como Ermitaño III, Evento o Impaciente II, además de caballos reconocidos como Doblón TR, Digital, Albero II o Batanero VII, hijo de Mañoso y nieto de Orfebre.

Hirto II

ESTIRPE CARTUJANA

Camborio, caballo Cartujano

A lo largo de la Historia el Caballo Español ha tenido una popularidad inalcanzable por otras razas, pero es a finales de la Edad Media cuando comienza su apogeo. Es el caballo más solicitado en toda Europa para guerras, viajes o deportes. Además, la Alta Escuela es la moda de la época entre la nobleza europea y eligen este caballo por su belleza y sus extraordinarias aptitudes para esta modalidad ecuestre. Prueba de ello es que es el caballo más utilizado para fundar nuevas razas como el Lipizzano en Austria o el Lusitano en Portugal.

El Ayuntamiento de Jerez es consciente de que posee los caballos más cotizados del mundo y en 1460 comienza su preocupación por la disminución de sus ejemplares. Es entonces cuando acuerda publicar una orden que prohíbe la venta de Caballos Españoles fuera de la zona sin permiso expreso del Corregidor, D Juan Pacheco.

A pesar de los esfuerzos por lograr la supervivencia y la pureza de la raza, fueron varios los acontecimientos que provocaron un gran peligro para el caballo español. Durante el reinado de Felipe III, estos caballos comenzaron a cruzarse con otras razas para lograr caballos más pesados. Además, el paso de las tropas de Napoleón por España fue el golpe más duro para esta raza, sus mariscales se llevaron los mejores ejemplares y muchas líneas se extinguieron.

Sin embargo, la raza logró sobrevivir gracias a los Monjes Cartujanos de los monasterios de Jerez y Sevilla, que desde el siglo XV se dedicaron a criar y conservar cuidadosamente la pureza de la raza. Fue entonces cuando se denominó a estos caballos, los Caballos de Estirpe Cartujana, siendo considerada hoy día la raza más pura del P.R.E.. El caballo de estirpe Cartujana ha sido pues reconocido por numerosos criadores como animal mejorador de diferentes razas equinas, principalmente la del P.R.E., y se podría decir que son considerados de gran prestigio y conservadores del patrimonio genético de la raza.

Árbol genealógico de los Caballos Cartujanos